De hecho, el certificado orgánico no es más que un sello oficial que confirma que el proceso de producción orgánica se lleva a cabo de manera orgánica. Podríamos concluir que se trata de algo más que inspección, seguros y mercadeo.
Hoy en día se usan poco los pesticidas y no existen variedades transgénicas de cocotero, pero esta certificación le da credibilidad.
Los mejores aceites de coco del mercado: nuestros consejos
Si bien es cierto que el aceite de coco tiene muchos usos, si no te convence la idea de utilizar el mismo producto para cocinar y para tu cabello, aquí tienes una solución. A continuación, te ofrecemos una selección de los 5 mejores aceites de coco para cada situación.
- El mejor aceite de coco prensado en frío
- El mejor aceite de coco virgen extra puro
- El mejor aceite de coco para el cabello
- El mejor aceite de coco para el rostro
Los 4 mejores
Aceite de coco de coco para el cuerpo
¿Qué hay realmente en el aceite de coco?
El aceite de coco se extrae de la pulpa de la fruta. Contiene principalmente grasas saturadas, que también se encuentran en grandes cantidades en la mantequilla y la carne roja. Al igual que otras grasas saturadas, el aceite de coco aumenta el colesterol LDL, comúnmente conocido como colesterol «malo», que se ha relacionado con un mayor riesgo de enfermedad cardíaca.
Pero el aceite de coco también aumenta el HDL, el colesterol «bueno», especialmente cuando reemplaza los carbohidratos en la dieta. Esto puede deberse a su alta concentración de un ácido graso conocido como ácido láurico. (Esto también se observa en el discurso de Michel).
Alzheimer
La enfermedad de Alzheimer puede ser causada por una alteración del metabolismo de la glucosa en el cerebro. Por lo tanto, obtener energía de otra manera podría aumentar el metabolismo neuronal y proteger las neuronas. Algunos estudios sugieren que los triglicéridos de cadena media pueden mejorar la función cognitiva en pacientes con Alzheimer al producir cetonas como fuente de energía alternativa.
Algunos estudios han demostrado que el aceite de coco reduce los niveles de colesterol, triglicéridos, LDL (colesterol «malo») y VDL y aumenta el HDL (colesterol bueno). Este efecto puede deberse al alto contenido en polifenoles de este aceite. Y otros como este señalan que las personas que consumen aceite alto en triglicéridos de cadena media mejoran más su perfil lipídico que quienes consumen aceite de oliva.
Aceite de coco refinado, más usos, pero menos propiedades
Al procesar industrialmente el producto, se elimina el sabor y olor natural del coco. En este caso se aprovechan otras propiedades del aceite de coco, como en el campo de la cosmética, aportando suavidad y una textura agradable a las cremas.
Gracias a su viscosidad, podemos encontrarlo purificado y transformado en manteca, como base para bálsamos labiales reparadores o para algunas cremas cubrientes.